Hablemos de las cosas buenas

 Hay que hablar también, de las cosas buenas, recordarlas...

Uno siempre se queja, siempre contamos y hablamos de todo lo malo, en nuestra vida personal, en nuestra familia, en nuestras relaciones, siempre hacemos ver que todo es tragedia y todo nos hace mal.Si hay cosas, muchas, que nos hacen mal, que llegan al límite y nuestra mente no quiere procesarlas. A veces no queda otra que convivir con esas cosas. Sobre todo cuando vivís con tu familia, es bancar todos los días, al final siempre es familia.

Y la verdad que con el resto de las personas deberíamos ser igual de pacientes de cómo nos gustaría que sean pacientes con nosotros, también son personas, también tienen emociones, la mayoría del tiempo no tenemos ni idea de lo que a esa persona le está pasando por dentro, miramos solo nuestro ombligo y lo que nos beneficie a nosotros y el resto que se joda, y no debería ser así, mucho menos con las personas que amamos. Resulta difícil creer que a veces podemos lastimar sin querer, sin pensar, a las personas que más amamos.

Hay formas de amar muy diferentes según la persona. Por ejemplo, mi abuela no suele dar abrazos, ni decir te quiero's, pero cada vez que necesito algo hace todo por darmelo, si llega a escuchar un "tengo hambre" aparece de cualquier lado a querer cocinarte lo que sea. Esa es su forma. Yo por ejemplo, soy una persona hipersensible, no por elección, solo nací así, mi forma con las personas que amo es siempre estar ahí, al lado, haciendo lo que sea, soy muy compañera, para algunas personas puedo ser pesada porque les gusta más estar solos, también me gusta mucho dar abrazos, dar regalos, escribir cartas, lo vivo en esa intensidad. Otras personas te ofrecen su tiempo, su espacio, sus charlas, te hacen reír, te apoyan en todo, son capaces de recorrer el mundo para que logres conseguir lo que querés, podrían pagar el precio que sea por verte sonreír, aunque no te digan te amo, aunque no sean tan abrazadores, demuestran así. Mi ex novio era así. Y me demostró su amor todo lo que pudo, en sus formas.

A veces el problema es pensar que hay una sola forma de amar, pero no, debemos aceptar que cada persona ama diferente, ama como puede, quizá no te dice te amo, pero te da de sí, todo lo que tiene. Debemos aprender a ver esas cosas y no solo quedarnos con las palabras.

Hablemos de las cosas buenas también, recordemos, seguro son muchas más.


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